La Piedad – Copia de la Escultura de Miguel Angel.

Museo del Cerro Otto – Bariloche -Argentina

 

Visitando el Cerro Otto, en Bariloche, quede sorprendido por las replicas o copias de tres obras escultóricas, las más famosas, de las tantas realizadas por el Escultor, Arquitecto, Pintor y poeta del Renacimiento Italiano, Michelangelo Buonarroti, más conocido por nosotros en español como Miguel Angel. Como decía pude apreciar las tres copias de sus vastísimas obras que realizo durante mas de 70 años de sus 89 años que vivió.

El Museo del cerro Otto tiene tres copias   o calcos, hechas de 80% de polvo de mármol y 20 % de resina acrílica en la Galería de Arte de Piestro Bazzanti y Fiblio, en Florencia, Italia.

El original se encuentra en la Basílica de San Pedro en el Vaticano.

Una respetada colega arquitecta, ante una publicación en una de las redes sociales me dijo lo siguiente: si se desea hacer cultura se debe presentar el original y no perder tiempo con la copia muy aproximativa!

Aun no he tenido la bendición de visitar el Vaticano y ver la obra original, sin embargo, mi intención aquí es describir la impresión que me ha causado la Copia muy aproximativa de la Piedad del artista.

No soy crítico de Arte, ni me creo un Giorgio Vasari, experto historiador, en Miguel Angel, simplemente deseo contarles lo observado con una suerte de reminiscencia histórica, sabiendo al decir de platón que la copia es apenas una sombra de la original que está en el Vaticano.

Esta copia en tamaño original, me ha causado una muy apreciable aproximación de una de las primeras grandes obras de escultor de 24 años que inició su carrera artística con 12 años en el taller del famoso Doménico Ghirlandaio  

La Piedad.

La Piedad fue esculpida en su primera estancia en Roma, entre los años 1498 y 1499, haciendo una escultura de bulto redondo. Esto significa que hay que girar alrededor de toda la obra para apreciarla.

El cerro Otto queda apenas unos 6 km del centro cívico de Bariloche y cuenta entre otras infraestructuras para el ocio, con un museo a los 1405 m de altitud que se llega tradicionalmente por el teleférico. Apenas uno desciende del teleférico y se aproxima a las salidas que dan al exterior o camino a la confitería giratoria, a la derecha y descendiendo por una escalera se aprecia el museo y lo primero que uno llega a ver es   la copia del monumental David de Miguel Angel.

El museo es también circular como la Confitería, y la izquierda se encuentra la Copia de la “Piedad” que el original es un conjunto escultórico hecho de un solo bloque de mármol blanco extraído de las montañas de Carrara, de allí el nombre de mármol de Carrara. La obra escultórica «Piedad» mide 195 centímetros de ancho y 174 centímetros de alto, en una composición basada en un triangulo equilátero sobre una base elíptica.

Esta fue la primera impresión al observar al conjunto ya que la compasión representa a dos figuras bíblicas y uno de los momentos más impresionantes. Es una escultura de bulto redondo que deberíamos apreciarlo al girar alrededor de ella, pero el diseño obliga a una mayor contemplación frontal, donde la figura central predominante es la virgen María.

La obra, representa el momento en que la Virgen María recibe el cuerpo de Jesús y lo sostiene en sus brazos, todo el peso del cuerpo de Cristo se apoya en sus piernas y tiende hacia atrás y hacia la izquierda. la virgen logra el equilibrio en forma diagonal tendiendo hacia la derecha.

Impresiona este equilibrio a pesar de la monumentalidad de la virgen María en relación al cuerpo de Jesucristo.

 

  Se nota la influencia neoplatónica en la obra, la juventud, la belleza, la serenidad de la virgen María, rompe la tradición escultórica que mostraba el sufrimiento. María sostiene con fuerzas con la mano derecha el cuerpo de Cristo por debajo de su brazo derecho y la mano izquierda queda libre y sugiere una actitud de oración.  La vestimenta de María es exuberante que apenas deja ver parte del pie izquierdo.

La expresión, la actitud de María, su rostro sin signos de dolor parecería  que está meditando sobre la muerte y el futuro próximo, la resurrección de Cristo.

Es como si Miguel Angel invitara al observador sobre la necesidad de meditar sobre la muerte de Jesús, la valoración del sacrificio y como deberíamos reaccionar ante lo inevitable para todo hombre.

La figura de Jesús languidecido, que, si bien no registra sufrimientos, los rastros de los clavos en las manos y pies apenas son unas pequeñas hendiduras demuestran que la muerte de Cristo es un hecho indubitable.

El rostro de Jesucristo parece la de un hombre común a todos los hombres, como durmiendo, ya que todo el sufrimiento de los últimos días con la apoteosis crucifixión ya han terminado, ahora resta dormir y esperar la resurrección.

Se tiene contabilizados otras obras que tratan sobre el descendimiento de Jesucristo de la Cruz que son muy diferentes a esta obra

Se cuenta sobre la inscripción del nombre de Miguel Angel en la vestimenta de la Virgen María, que circulaba el rumor de que un tal Gobbio, de Milán, había esculpido la magnífica obra de la Piedad. Indignado por la falsa atribución, y a fin de despejar cualquier duda, esa misma noche que escucho el rumor, Miguel Ángel grabó su nombre en el cinto que atraviesa el pecho de la Virgen María.

La impresión que uno recibe observando la copia de la obra es realmente una sensación de respeto, admiración por la genialidad, y habilidades de quien más tarde seria llamado “el divino”.

Termino diciendo a pesar de observar solamente esta copia y en relación al original …"Miguel Ángel Buonarroti, el Florentino lo hizo".

Arq. Julio Rubén Elizeche.

 

 

Fotografías con el celular Motorola G (30).Arq. Julio Elizeche .-

23/07/2023.